MOLINOS CON ANIMALES

El  molino generalmente constaba de una piedra circular fija sobre la que se movía otra piedra parecida

Para mover la piedra móvil (se la llamaba muela), se podía hacer usando la energía de aire, la del agua o la fuerza de los animales.
El grano se iba poniendo sobre la piedra fija, la que no se movía, y  el polvo molido salía por los borde y se recogía. El grano de cualquier cereal se reducía a harina.
Según lo que se fuese a moler en la región donde se instalaba el molino, se tallaban las piedras con un dibujo diferente. Así, existe un tallado determinado y diferente para moler trigo, maíz, etc.

Molinos con animales 

En lugares sin vientos ni ríos aprovechables, se construyeron estos molinos. Para mover la piedra se  cruzaban unos maderos a los que se enganchaban mulas o bueyes, que caminaban en círculo, para mover la piedra. Los animales llevaban los ojos vendados para evitar el mareo.
Este tipo de molino tiene un origen muy antiguo.