¡Hola amiguitos! Me llamo Constitución y
estoy muy contenta porque el 6 de diciembre es mi cumpleaños y habrá una gran
fiesta para celebrarlo, ese día será de vacación y no tendréis que ir a la
escuela. Además, la radio y la televisión hablarán de mí y me felicitarán.
Quiero ser amiga vuestra pero como todavía no me conocéis os voy a contar la
historia de mi vida.
Lo primero que os tengo que decir es que soy
un poco rara porque en lugar de tener un cuerpo como el vuestro, el mío está
formado por hojitas de papel, como un libro o una revista. No fui la primera de
mi familia, ya había tenido varias antepasadas... ¿qué pasa? ¿qué no sabéis que
es una antepasada? pues ahora os lo voy a explicar: antepasados son los
familiares que han nacido muchos años antes que nosotros, así como los abuelos
y los bisabuelos. Yo he tenido 6 antepasadas, pero cuando nací todas se habían
muerto ya porque se habían quedado muy viejecitas.
Nací el 6 de diciembre de 1978, así que
ahora voy a cumplir 35 años ¿verdad que ya soy muy mayor? Cuando nací todo el
mundo se alegró muchísimo porque desde que se murieron mis antepasadas no había
ninguna constitución en España.
Como ya sabéis, cuando nace un bebé todo el
mundo va a verlo y le lleva regalos, así que os voy a contar el montón de cosas
que me dieron: El mago Catapún Chispún, que es muy amigo mío y sabe predecir el
futuro me dijo que hablaría castellano pero que como soy muy lista también
hablaría otras lenguas cuando saliera de viaje a algunos sitios de mi país que
es España. Me regalaron un vestido muy bonito hecho con la bandera de España
¿sabéis cómo es? con dos franjas rojas y una amarilla en el centro. También me
dieron una chapa con un escudo nuevo. Desde entonces lo llevo siempre en mi
vestido.
Estaba tan cansada al acabar el día que
después de tomar mi biberón me quede dormida y empecé a soñar. Y soñé que iba
volando por el cielo y volando veía muchas cosas feas: la gente reñía por todo,
había muchas discusiones y peleas, yo me puse muy triste y quise solucionarlo,
así que me fui a una casa donde estaban reunidos unos hombres muy listos y les pedí
que escribieran en mi cuerpo unas normas para que la gente se portara bien y no
riñera más (acordaros que mi cuerpo está hecho de hojitas de papel) esos
hombres empezaron a escribir y siguieron escribiendo hasta rellenar todo mi
cuerpo.
Cuando me desperté ¡qué sorpresa! todo
aquello se había convertido en realidad y mi cuerpecillo estaba lleno de
letras. La noticia corrió por todos los sitios y empezaron a venir otra vez
gente y más gente. Desde entonces cuando las personas empiezan a discutir leen
lo que tengo escrito en mi cuerpo para saber quien tiene razón y llegar a
acuerdos en lugar de pelearse.
Ahora termino ya de contar mi historia pero
recordad que mi cumpleaños es el día 6 y tenéis que celebrarlo conmigo.